Hoy toca DIY: un cojín estampado con sello de hoja de Monstera, planta tropical por excelencia.

Los fines de semana son días de DIY's por eso de que tenemos tiempo para sentarnos y ver posibilidades, además hacía ya un tiempo que no realizaba uno y ya tocaba... :) 

Desde que hice el post sobre el carvado de sellos y la estampación sobre tejido hace un par de meses, me quedó rondando en la cabeza probar a realizarlo por mi misma. 

Como ya os comenté en la publicación por entonces, hay muchas técnicas con sellos para realizar sin tener que usar el caucho, material quizás mas complicado para utilizarlo por primera vez sin complicarse tanto y sin tener mucha práctica. Por ese motivo he escogido un material mucho más dúctil y sencillo de recortar como es la goma eva para llevar a cabo su elaboración y más fácil de realizar de lo que a primera vista parece. 

Como me encantan los cojines, después de confeccionar los que hice nuevos para el sofá de mi salón y que publiqué en esta entrada usando unos tejidos de un muestrario que tenia guardado,  necesitaba uno nuevo para mi sillón con una temática botánica similar y en los tonos más parecidos posible. 

Para crear las plantillas de la estampación, he elegido la hoja de la Monstera, planta tropical que todos conocemos por sus enormes proporciones e increíbles formas,  de lo más adecuado para crear ilustraciones sobre tejido. Comencemos pues por los materiales básicos que vais a necesitar para su elaboración y confección.  

MATERIALES: 

• Tejido de algodón en color crudo o color lino. 
• Metro y tijeras
• Pinceles
• Cola para pegar papel
• Pintura especial para tejidos o acrílicas, en color verde Miami, dorado y azul Wedgewood. 
• Goma Eva  (grosor de 3 o 4 mm mínimo) 
• Papel para las plantillas 
• Sellos de porexpan (puedes usar cualquier material duro que sirva para pegar la goma eva)
• Plantilla con forma de hojas de Monstera, 3 en un collage (puedes descargártela aqui) 
• Impresora

ELABORACIÓN: 

Una vez impresas y recortadas las plantillas en el tamaño que desees, vamos a proceder a perfilarlas sobre la goma eva con un rotulador que no deje muchos residuos. 

Ya dibujados los perfiles de las hojas se recortan con las tijeras con cuidado que no queden picos y que el corte sea lo más recto posible para que al estampar sobre el tejido el dibujo sea nítido y no queden rebabas donde se pueda depositar la pintura en exceso y manche el tejido. 

Una vez recortadas, con un pincel procedemos a aplicar la cola para después pegar cada hoja sobre el soporte que hace de sello. Es conveniente dejar secar el tiempo que indique el fabricante del producto y así no tendremos sorpresas a la hora de estampar.

Ya creados los sellos con la imagen viene la parte más divertida: la estampación en sí misma¡¡ 

El tejido elegido por mi para la confección del cojín es algodón mezclado con lino, y el tamaño que he recortado es de 54 x 54 cm (se debe dar 1 cm de más para el pespunte) la misma medida del relleno de pluma que introduciré una vez acabado. 

Como quiero que el reverso del cojín lleve las mismas telas y en los mismos motivos y colores que los que confeccioné para mi sofá, he recortado dos tejidos del muestrario similares. Vosotros evidentemente podéis utilizar el mismo tejido que vais a usar para el anverso si queréis, o bien alguno que haga un contraste con los colores elegidos para la estampación y el lugar donde irá ubicado. 

Aquí vamos a dejarnos llevar por nuestra vena creativa y aunque siempre es conveniente seguir un patrón imaginario de impresión para que el dibujo posea un equilibrio, no es necesario que las imágenes queden demasiado perfectas, todo lo contrario ya que la imperfección obrará milagros y ofrecerá una ilustración mas natural y como desgastado por el uso,  al ojo que lo mira.
Yo he optado por aplicar la pintura sobre cada sello con los pinceles en vez de mojarlos sobre ella, de esta manera solo se cargará con la cantidad exacta que desees y así podrás estampar más o menos nítido según la presión que ejerzas sobre la tela. Es aconsejable probar varias veces sobre un resto de tejido que no te valga, así irás comprobando como realizarlo sobre el original.

Después de todo el proceso de estampado y una vez terminado, este es el resultado de mi creación con los sellos y sus hojas en tonos verdes, dorados y azules, una combinación divertida y que queda preciosa, no os parece?  Para ser mi primer trabajo con esta técnica no ha quedado tan mal...  ;) 

NOTA: Si has elegido pinturas especiales para tejido, para que queden fijadas y no se vayan con los lavados, los fabricantes siempre indican la necesidad de plancharlas por el revés con la plancha lo más caliente que aguante el tejido elegido. De esta manera alargarás la vida del dibujo y quedará fijado sin problemas. En mi caso, he elegido pinturas acrílicas y por lo tanto no es necesario. 

CONFECCION: 

Ahora vamos a confeccionar el reverso del cojín con las telas elegidas del muestrario. Voy a cerrarlo con botones y hojales, en vez de cremallera, ya que el resultado es más vintage y me encanta el toque elegante que imprimen los botones con la solapa bien realizada. He elegido botones antiguos de madera con detalles muy bonitos alrededor en el mismo tono de azul del fondo de una de las telas. 

Ahora hay que recortar las dos partes que componen el reverso, calculando la mitad para cada una aproximadamente, si es que quieres centrar la parte de la botonadura. 

En la parte donde iran los hojales, se realizará una solapa en doblez que se pespunteará con la máquina y en la otra con hacer un dobladillo sencillo será suficiente (imagen 1). Una vez terminadas ambas (imagen 2), hay que medir donde irán los cuatro botones a la misma distancia (imagen 3).  

Marcar en el tejido con el lápiz el tamaño de cada botón para no salirnos (imagen 4) y pasarlos a la máquina de coser en su versión hojal (imagen 5). Una vez terminados y abiertos los hojales, superponer cada parte del anverso del cojín para marcar donde irán cosidos los botones y coserlos (imagen 6) 

Ya terminada esta parte es aconsejable abotonar para formar un todo con ambas partes (imagen 7) y con ambos dibujos hacia adentro enfrentándolos vamos a montar el cojín con alfileres (imagen 8) para pasarlo a la máquina y darlo por terminado. 

Ya solo queda darle la vuelta al cojín y planchar los bordes con vapor a la máxima temperatura que soporte el tejido usado para que queden las costuras bien aplanadas (imagen 9) 

Y este es el resultado final del DIY de hoy, un cojín totalmente personalizado a juego con el resto de las tapicerías de mi salón y con un toque de lo mas chic y colorista. 

Os ha gustado? Estoy segura que si, y me encantaría que alguno de vosotros probara a confeccionar una pieza similar para realizar algo con esta técnica que es de lo más divertida, sencilla y creativa. ¿Te atreves?  Lo cierto es que solo hay que propornérselo¡¡ 

 Si es así estaría encantada que lo compartieras en mi fan page de Facebook  ;) 

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De paso me llevo este DIY tan chulo al FINDE FRUGAL 135 de mi querida Marcela¡¡ No olvidéis pasaros por allí y ver lo que han realizado otras amantes de los "hecho a mano" como yo... ;) 

IMÁGENES: Propiedad de Karmela.